jueves, 25 de julio de 2019

El gobernador y las dos caras de Jano


El gobernador y las dos caras de Jano
Por Pablo Alejandro Puello Díaz

Mucho se ha comentado sobre el notorio chat que ha puesto a todo un pueblo en pie de lucha para exigir su respeto ante la indignación de un gobernarte que cada día presenta mayores muestras de no querer escuchar y no llegar a la conclusión de que su fin en la silla de la gobernación es un hecho. Además, mucho se ha analizado sobre el “efecto María” en la población puertorriqueña, los cuales lejos de aminorar sus fuerzas, sin duda alguna, se han levantado como el ave fénix, el cual resurgió entre polvo y cenizas como un ser renovado y listo para la batalla.

Por otro lado, algo que no escapó ante la atención pública fue la cierta dualidad presentada por el gobernador. Dualidad que quedó manifestada claramente al momento de revelarse el chat de la aplicación denominada como Telegram.

Al igual que Jano, el dios mítico romano representado con dos caras y al cual se le ha designado en la antigüedad como el dios de las transiciones, comienzos y finales, el gobernador Ricardo Roselló demostró al pueblo dos caras.

Sin duda alguna, la vertiginosa carrera hacia el poder por parte de Roselló en el año 2016 fue un fenómeno político. Cientos de miles de personas pudimos ver a un joven lleno de virtudes y con deseos genuinos de servir a Puerto Rico. No pocos fueron los que vieron en la figura del científico Roselló a una persona con grandes dotes de analista capaz de buscar soluciones a los grandes retos que enfrentaba la Isla. Por otro lado, no es menos cierto que sus lazos con la política siempre estuvieron a su lado gracias a la figura de su padre. Aunque el joven, inexperimentado en política, no representara grandes dotes de orador, como lo presentado por sus contrincantes, el pueblo llegó a la conclusión que, a diferencia de su oratoria, sus virtudes se encontrarían en otras áreas, ya que detrás de todo se escondía su llamado plan, del cual muchos depositaron su confianza a ciegas.

No obstante, y al igual que Jano, se encontraba la otra cara del dios romano, en este caso, la otra cara del gobernador. De suma indignación fue para todo un pueblo el poder observar a un Ricardo Rosello de forma totalmente distinta a lo anteriormente presentado, no solo por él mismo, sino por lo mostrado por los medios de comunicación y redes sociales. Cierto fueron los insultos a una vasta serie de sectores de la sociedad, en la cual, todos de alguna manera se sintieron identificados; cierto fue la manera despiadada en cómo se conspiraba para eliminar obstáculos a la causa política como lo eran los opositores, no solo fuera del partido sino incluso dentro del mismo. Sin embargo, la más grande indignación vino a revelarse al poderse contemplar los comentarios cínicos hacia aquellos cadáveres provocados por el paso del huracán María. Peor aún, fue la devastadora noticia, en la cual se supo sobre el arrebato y ocultamiento de suministros destinados a los damnificados por María, con el fin único de obtener beneficios políticos; y provocando a la postre que tales hechos se transformaran en la principal fuente de energía para las futuras marchas y protestas multitudinarias.

Dentro del imaginario puertorriqueño aquella imagen de joven científico, comprometido con el pueblo y desligado de influencias políticas malintencionadas provocó que todo comenzara a echarse por la borda de forma veloz. Aquellos comunicados de prensa, como fue la nefasta entrevista a la cadena Fox News, eliminó toda duda respecto a la capacidad gubernativa que pudiera aún albergar el joven gobernador. Aquel hombre de Estado comenzaba a difuminarse como neblina ante un amanecer protagonizado por una masa de puertorriqueños, entre los cuales se encontraba la generación autodenominada como la del “yo no me dejo”.

Si la entrada de Ricardo Roselló a la gobernación representó ser un verdadero fenómeno dentro de todo el entramado mundo político, su salida no pasaría por desapercibida. Ante la larga espera del tan anunciado discurso de renuncia, un sin número de teorías comenzaron a formularse respecto al porqué de la dilación. Miles se congregaron dentro de la ciudad amurallada del Viejo San Juan para presenciar un evento histórico en donde un gobernador renunciaba a su cargo. Y en efecto, ante la afirmación de la renuncia, la celebración estalló como una fiesta de pueblo no muy lejos de tener paralelismos a una celebración de despedida de año, en este caso la despedida del gobernador de Puerto Rico.

Ante los eventos transcurridos en apenas dos semanas ha quedado por demostrado que desde de Fortaleza fuimos gobernados por un político que presentó dos caras. ¿Cabe preguntarse ahora, cuál de las dos caras representó ser la verdadera?

martes, 9 de julio de 2019

Prólogo a Nuevos hallazgos sobre el origen de Ponce


Prólogo a Nuevos hallazgos sobre el origen de Ponce
Por Pablo L. Crespo Vargas

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Dentro del estudio de la historia de Puerto Rico, uno de los mayores atractivos, tanto para los investigadores como para los interesados en estos temas, es la historia de los municipios de la Isla. En el caso de esta obra, se busca presentar el análisis de nueva evidencia encontrada en los archivos coloniales que refuta o modifica la versión oficial que indica que el partido de Ponce fue fundado en 1692. Aunque muchos lectores y estudiosos quisieran conocer una fecha precisa para este acontecimiento, nuestro autor e historiador, el Dr. Luis Caldera Ortiz, nos explica que la fundación de Ponce fue un proceso complejo y no estructurado, que se dio bajo unas circunstancias particulares y poco entendidas hasta hoy día. El análisis que el Dr. Caldera Ortiz desarrolla nos lleva a profundizar en cómo se analiza la historia y nos deja ver que esta no es solamente un manojo de hechos concretos que pueden ser establecidos con precisión.

Aunque el autor nos presenta una metodología mayormente positivista, también demuestra que el conocimiento histórico se desarrolla dentro de una complejidad que da espacio al uso de otras disciplinas (que algunos llaman auxiliares, pero que consideramos son medulares) para poder establecer una visión más diáfana de lo que ocurrió.

La obra, Nuevos hallazgos sobre el origen de Ponce, es una revisión de un hecho que de manera oficial ya había sido establecido, pero que nuestro autor retoma para demostrar que la datación de este suceso no fue tan certera como se había pensado.

La historia oficial, establecida a partir de los estudios de Eduardo Neumann, nos indica que Ponce se constituyó como ente político autónomo en 1692. Esta teoría lleva sobre un siglo de vigencia. Debemos aclarar que Neumann propuso esta fecha a partir de la documentación y la información que tuvo disponible al momento de realizar su investigación. Con el pasar del tiempo, el descubrimiento de nuevas pruebas y los adelantos en la metodología histórica, ayudaron al Dr. Caldera Ortiz para que este desarrollara una visión más clara sobre aspectos tales como la demografía, la política pública, las milicias urbanas y la administración de la zona sur de Puerto Rico durante los siglos XVI, XVII y XVIII. Aspectos que al juntarse nos llevan a ver qué Ponce es mucho más antiguo de lo que se pensaba. En la obra se detallan las razones y las circunstancias que se dan para que nuestro autor indique con certeza que ya en el 1692 Ponce existía como unidad política y geográfica.

Invitamos al lector a que examine los argumentos que el Dr. Caldera Ortiz plasma en la obra y pueda establecer su propio análisis sobre una serie de procesos que se dieron en los primeros siglos de nuestra historia. También, invitamos a otros estudiosos de la historia a continuar investigando y dando a conocer sus hallazgos, de esa forma seguiremos promoviendo el estudio histórico y el conocimiento general.