sábado, 14 de junio de 2025

Prefacio al poemario «Reminiscencias»

Prefacio al poemario «Reminiscencias»

Yamil Aponte Padilla

Enlace para comprar en Amazon
Este libro está dividido en cuatro partes y acopia una poesía que nace desde el 2008 hasta el 2024. Podría afirmarse que es una poética que explora múltiples manifestaciones y voces del amor. El hablante lírico cuestiona desde lo más profundo el amor sobre el ser y su mundo. Entre los poemas existe una inseparable continuidad y una estrecha relación. Es una poética que se repliega sobre sí misma. En ella, el amor siempre se transforma.

Deseo agradecer al Dr. Pablo L. Crespo Vargas por sus atenciones y su disponibilidad para la publicación de este texto, mi primer poemario. De igual manera, valoro el apoyo de mi familia y de ese círculo muy cerrado de amistades, gente verdadera y genuina.

Espero que puedan sentir desde lo más profundo cada palabra, cada verso y que el hablante lírico les toque el alma y recorra por todos sus sentidos. Que cada verso llegue hasta lo más profundo de la piel.

martes, 3 de junio de 2025

Fragmento del libro «Nicolás Fajardo en la conquista española de Puerto Rico, siglo XVI»

Fragmento del libro «Nicolás Fajardo en la conquista española de Puerto Rico, siglo XVI»

Francisco Moscoso 

Enlace para adquirir en Amazon

Nota de introducción

Con la documentación disponible es difícil y resulta incompleto intentar hacer una biografía de los conquistadores españoles de Puerto Rico, en general. De muchos, lo que tenemos son datos fragmentados y lagunas entre años. No hay más remedio que juntar los pedazos de información que por lo menos nos puedan dar una idea de sus andanzas. Tal es el caso de Nicolás Fajardo.

Inicios de la colonización

La conquista española de Puerto Rico se llevó a cabo, efectivamente, entre 1508 y 1521. Para entonces todos los cacicazgos de los taínos, habitantes indígenas de la isla, habían sido subordinados o aniquilados. En ese periodo la capital colonial era la Villa de Caparra, a la que llamaron indistintamente Ciudad de Puerto Rico. Desde su segundo viaje a América en 1493 el almirante Cristóbal Colón cambió el nombre nativo de la isla, Boriquén, al que marcaba la dominación imperialista: Isla de San Juan Bautista.

El puerto Rico se refería a la bahía de San Juan, aludiendo a la riqueza de oro advertida en sus cercanías por el capitán Juan Ponce de León, quien estuvo al mando de la conquista en sus comienzos. Después del proceso de mudanza a la Isleta situada a la entrada de la bahía y fundación allí de la nueva capital en 1522, con el tiempo se trastocaron los nombres: ciudad de San Juan e Isla de Puerto Rico. En algunos documentos de aquellos años la isla se identificó también como San Juan de Boriquén. A pesar de todo, los puertorriqueños se siguen refiriendo a Puerto Rico igualmente con el vocablo modificado de Borínquen; y como sinónimo de puertorriqueños, boricua.

Durante esos años la actividad económica principal fue la minería del oro. La subsistencia estuvo basada en la agricultura, aprovechando la zapata agrícola taína previa, y la ganadería, de nueva introducción; y en menor escala la pesca. Los españoles impusieron un régimen de trabajo mixto: la Encomienda o repartimiento de indios declarados «vasallos libres» de la Corona, efectuado mediante la estructura social cacical, subordinada mediante pactos y/o la fuerza; y la esclavitud, como castigo a los indios rebeldes.

Uno de los métodos de la conquista fue el de las cabalgadas. Estos eran ataques encabezados por grupos de caballería contra caciques y territorios rebeldes o por dominar. Aldeas eran incendiadas y conucos, o campos de cultivo eran arrasados. En la refriega de horror y destrucción indios e indias, especialmente mujeres, niños y niñas fueron capturados y esclavizados. En ese escenario es donde primero aparece documentado Fajardo.