miércoles, 24 de mayo de 2017

Reseña a Esperanza y liberación. Desde Abelardo Díaz Alfaro a Leonardo Boff

Reseña del libro: Esperanza y liberación. Desde Abelardo Díaz Alfaro a Leonardo Boff. Publicaciones Gaviota, 2017.  286 págs. Autor: Dr. Luis G. Collazo Torres.

Por
Rvdo. Pablo Rafael Caraballo Rodríguez
Director de la Oficina de Capellanía
Recinto de San Germán
Universidad Interamericana de Puerto Rico

 
Por eso es que hoy tenemos esperanza,
Por eso es que hoy luchamos con porfía,
Por eso es que hoy miramos con confianza
El porvenir en esta tierra mía.

Federico Pagura, Tenemos esperanza[1]


Libre, como el sol cuando amanece;
yo soy libre como el mar.
Libre, como el ave que escapó de su prisión
y puede, al fin, volar.
Libre, como el viento que recoge mi lamento
y mi pesar, camino sin cesar detrás de la verdad
y sabré lo que es al fin, la libertad.

Nino Bravo, Libre


Este libro consta de siete ensayos enmarcados en el tema de la esperanza y la liberación. Inicia con un ensayo donde se analiza los escritos de Abelardo Díaz Alfaro desde una perspectiva teológica. El último capítulo del libro es una reflexión sobre la fe, la razón y la liberación en la teología de Leonardo Boff, considerada una de las figuras más importantes en el surgimiento y desarrollo de la teología de la liberación latinoamericana. Es evidente que todos los ensayos contenidos en este libro tienen como referente a la teología de la liberación latinoamericana. Comparado con los demás ensayos, el más corto es el que lleva por título Espiritualidad, competencia y liberación (p.177–189). Cada uno de los ensayos está acompañado por una bibliografía citados por el autor que, también tienen el propósito de promover el continuo estudio de los temas tratados. Además, el autor enriquece este libro con algunos poemas como lo son Sólo le pido a Dios de León Gieco; Oda la paz del propio autor del libro; el seis montuno Allá en la altura de Francisco Roque Muñoz y Por qué cantamos de Mario Benedetti. Al final del ensayo dedicado a la teología en los escritos de Díaz Alfaro se incluye unos breves datos biográficos, así como en el ensayo al final del libro dedicado a la teología de Leonardo Boff.

Hay que señalar que quienes tengan el placer de leer este libro deben estar familiarizados y desear conocer algunos detalles de la teología de la liberación como una manera de hacer teología. Conceptos como liberación, esperanza, opresión, opción preferencial por los pobres, entre otros, son parte del lenguaje de la teología de la liberación.[2]

Inicia este libro con el ensayo Teología en Abelardo Díaz Alfaro. Considero que el ensayo más enriquecedor y magistral es el dedicado a la teología en los escritos de Díaz Alfaro, donde el autor los analiza recurriendo a la teología de la liberación y a la teología negra. Este es un buen estímulo para releer los escritos de Abelardo Díaz Alfaro de una manera nueva y de contextualización de la teología. Dos acercamientos teológicos contextuales que tienen su punto de partida en las experiencias que viven los seres humanos: una, desde los pobres; la otra desde la comunidad negra o afroamericana, particularmente en los EEUUA. Influenciado por la teología de la liberación, el autor analiza estos escritos de Díaz Alfaro utilizando la clave de la «opción preferencial». El autor descubre en los escritos de Díaz Alfaro un cristianismo liberador que se expresa en varias «opciones»:
  1. Opción preferencial por la paz
  2. Opción preferencial cristológica por el pobre
  3. Opción preferencial por el amor como equilibrio vital
  4. Opción preferencial por la protección del ambiente enmarcado en el amor por la naturaleza
  5. Opción preferencial por la dignidad de las personas negras y por la igualdad racial
  6. Opción preferencial por una espiritualidad como elemento vital: por la vida abundante y plena

Comparte el mismo acercamiento de análisis de escritos de la literatura en clave teológica con otro intelectual puertorriqueño: el Dr. Luis N. Rivera Pagán. Ejemplo de ello es el libro Mito, exilio y demonios. Literatura y teología en América Latina. Aquí se analiza algunos escritos de Alejo Carpentier, de León Felipe y de Gabriel García Márquez.[3]

En La paz: promesa y desafío, el autor analiza el problema de la violencia, particularmente el problema de la guerra. Es una exposición de la opción preferencial por la paz, de cara a la violencia de la guerra. El Dr. Collazo señala que la guerra es la encarnación plena y final de la violencia y la prepotencia política que constituye todo un proceso de deshumanización absoluta y total. La guerra ha sido utilizada como una opción preferencial para la resolución de conflictos. Por eso es necesario proponer una opción preferencial por la paz. Con la guerra se ignora la sacralidad de la vida y, a su vez, la guerra es utilizada como un proyecto histórico e instrumento político. Para el autor, la opción preferencial por la paz para la solución de los conflictos nos llama a desafiar la guerra y la violencia en todas sus manifestaciones usando la desobediencia civil y la resistencia pacífica como métodos legítimos para propiciar cambios (p.86).

Otro intelectual puertorriqueño que ha hecho este tipo de análisis teológico los es el Dr. Luis N. Rivera Pagán en su libro de 1988 A la sombra del Armagedón: reflexiones críticas sobre el desafío nuclear.[4] También la Dra. Anaida Pascual Morán ha estudiado y expuesto el tema de la paz y la acción civil no violenta en su libro Fuerza de espíritu, fuerza de paz. Acción civil noviolentaI.[5]

El tercer ensayo del libro La trinidad en la perspectiva de la teología de la liberación se propone una opción preferencial por la solidaridad, la salvación y la solidaridad liberadora. Aquí toman prominencia los escritos de Leonardo Boff y de Gelbert Creshake sobre la Trinidad. El autor señala que el tema de la Trinidad hay que abordarlo como un paradigma de comunión e integración vinculándolo al proyecto de salvación y liberación (p.105). Por lo que, la trinidad debe ser considerada como la plena manifestación de Dios a la comunidad humana (p.101). Es reflexionar sobre el tema de la Trinidad en un contexto histórico de cara a un mundo polarizado y con déficit de solidaridad, una secularización depredadora y un neoliberalismo sin escrúpulos (p.96). Teológicamente, nos insiste el autor, la Trinidad está vinculada con el proyecto salvador – liberador; con la relación activa amor – redención; con la manera particular de “ser” en el mundo para la interdependencia, la solidaridad, el amor y la justicia; con el amor como la “esencia de la existencia”; con la coexistencia, la diversidad, la equidad y la integridad como constituyentes esenciales de una vida plena, abundante y solidaria (p.117); en la Trinidad se encuentra la semilla para defender la pluralidad, la diversidad y la interdependencia para una verdadera aldea global viable y autosustentable (p. 117). Además, la reflexión teológica de la Trinidad en clave solidaria y liberadora asume la responsabilidad social y planetaria dentro del proyecto del Reino de Dios.

En el primer volumen de la obra Mysterium Liberationis. Conceptos fundamentales de la teología de la liberación se puede encontrar un ensayo dedicado al tema escrito por el teólogo brasileño Leonardo Boff. Recientemente, el teólogo y filósofo Xabier Pikaza ha escrito dos obras (Teodicea. Itinerarios del hombre a Dios, 2013 y Trinidad. Itinerario de Dios al hombre, 2015), donde hace un acercamiento sobre el tema de la Trinidad no en abstracto, sino como una reflexión bíblico – teológica acerca de Dios Padre de Jesús, con Jesús de Nazaret y el Espíritu Santo, siendo despliegue de amor en y para la humanidad en la historia. La reflexión teológico – cristiana de la Trinidad en clave salvadora – liberadora se enfrenta a la “trinidad” del mercado neoliberal y neo – capitalista: Capital – Empresa – Mercado que impera en el mundo, y del cual la humanidad y la creación necesitan ser salvados y liberados.[6]

Teología, política y economía: una perspectiva desde la teología latinoamericana de la liberación es el cuarto ensayo de este libro. Aquí se analiza el discurso político – teológico de Jacques Ellul. Este fue un abogado, activista y teólogo protestante francés. En sus escritos utilizó las categorías marxistas para el análisis social. Sus escritos se dividen principalmente en dos categorías: escritos sociológicos de corte marxista y escritos teológicos de corte reformado. Se dice que sus principales ideas teológicas es que la relación entre Dios y el mundo es contenciosa y que el mundo está en constante lucha contra la voluntad de Dios.[7]

El autor ubica la situación colonial y económica de Puerto Rico, subordinada a la política y economía de los EEUUA dentro de la configuración económica del mundo actual y la realidad del neoliberalismo y la globalización. Por lo que propone una opción preferencial política del cristiano en la construcción del Reino de Dios desde y para la liberación humana. Me parece que el autor lanza un gran reto a la iglesia cristiana y a todos aquellos que afirman su convicción cristiana: es un imperativo moral la participación política del creyente en clave de liberación para enfrentar la situación colonial y económica de Puerto Rico. Puede ser iluminador dar una mirada a los escritos de Antulio Parrilla, a las publicaciones de Puerto Rico Evangélico, y a las publicaciones del Movimiento Ecuménico Nacional de Puerto Rico (PRISA), sobre esta participación política del cristiano en la realidad que vive Puerto Rico. Además, no se debe olvidar que el libro Fe cristiana y descolonización de Puerto Rico editado por el teólogo puertorriqueño Luis N. Rivera Pagán y publicado por la Mesa de Diálogo Martin Luther King, Jr. (2013), aborda este asunto y es una referencia importante para la reflexión de una pastoral descolonizadora de Puerto Rico[8].

Como antes les indiqué, el ensayo más corto lleva por título Espiritualidad, competencia y liberación. En este, el autor propone una opción preferencial por una espiritualidad para la afirmación de la humanidad propia y la humanidad del otro. Esta es una espiritualidad de la responsabilidad, la solidaridad y la liberación por y de la humanidad. Inicia este ensayo con el seis montuno Allá en la altura. El autor interpreta que este poema – canción reta a mirar críticamente a la modernidad (p.179). Siguiendo al teólogo peruano de la liberación Gustavo Gutiérrez señala que la “espiritualidad es vida” y que la misma implica la superación de la resignación, para proyectarse como resistencia, como protesta, como posibilidad de liberación (p.180). Según el autor, esta espiritualidad capacita a las personas para asumir acciones revolucionarias (p.180). Es una espiritualidad que no se da alienada de la realidad histórica. Ante los desafíos cotidianos de la vida, esta espiritualidad en clave de liberación conduce a la plena competencia humana contextualizada en la realidad histórica (p.181). El autor afirma, que el ser humano es un ser espiritual, racional, emocional, sensible, global, ciudadano de la “aldea global” (p.182).

Para el autor, la espiritualidad ha de ser la perspectiva donde la competencia humana contribuya a la humanización y la liberación del opresor y el oprimido; del prepotente y del humillado. Estas ideas también son expresadas, en un libro del teólogo alemán Jürgen Moltmann, que lleva por título La dignidad humana (1983). Moltmann señala que la opresión tiene dos aspectos: «Por una parte, está el Señor y, por otra, el esclavo. Por una parte, está el explotador y, por otra, su víctima. El opresor se convierte en inhumano, el oprimido se convierte en deshumanizado. La opresión destruye, por tanto, la humanidad por ambas partes, pero de distintas maneras: una, por el mal; la otra, por el sufrimiento». Moltmann señala que la humanización del opresor se ha de dar mediante la fe que le lleva a descubrir a Dios que se ha hecho hombre en Jesucristo. En él descubre aquella humanidad que él perseguía en sí y en otros oprimiéndola y destruyéndola. La opresión, por tanto, debe ser eliminada en las dos vertientes: en el opresor y en oprimido. Por lo que, el opresor liberado y el oprimido liberado, ambos desde la fe y la espiritualidad cristiana, trabajan juntos por la liberación en toda la sociedad.[9]

Quisiera añadir, siguiendo al teólogo José María Castillo en su libro Espiritualidad para insatisfechos, que la espiritualidad es la forma de vida que se deja guiar por el Espíritu de Cristo que, abarca la vida entera de la persona: su espíritu, su cuerpo, su individualidad, sus emociones, sus relaciones sociales y públicas, su condición como miembro de una iglesia y de ciudadano del mundo. La espiritualidad afecta e interesa a todo lo que el hombre y la mujer son en su existencia concreta. La espiritualidad bien practicada lleva a las personas a la plenitud de vida y al logro, así como a la afirmación de la humanidad[10].

El penúltimo ensayo, Religión civil y seguridad nacional: un enfoque ético multidisciplinario, el autor nos propone una opción preferencial por una ética de la ciudadanía global y la seguridad global para una sociedad civil inclusiva, pluralista, solidaria y justa para la promoción de una cultura de paz. El autor analiza la religión civil en el contexto norteamericano. Señala que la religión civil puede ser vista como la nueva experiencia religiosa que responde a los paradigmas de la secularidad dominante. Por lo que, los proyectos históricos de la modernidad han contado con un aliado ético – religioso en la religión civil (p.197). Así se garantiza la permanencia del status quo, los poderes hegemónicos de un estado o nación; sirve como fuerza moral del poder establecido; se sacraliza el orden social, político y cultural de la clase dominante. Además, la religión civil constituye la base ética de la seguridad nacional (p.229).

Es esta religión civil la que construye mitos, como nos señala Richard T. Hughes en su libro Mitos de los Estados Unidos de América, que transmiten creencias y convicciones comúnmente compartidas acerca de los propósitos y del significado de los EEUUA. Mitos como, el de la nación escogida y el de la nación cristiana, han sido utilizadas para promover toda una empresa colonial en América Latina y en el Caribe[11].

Para el Dr. Collazo, la religión no necesariamente tiene que ser la plataforma sacra y ética de las clases dominantes. También, la religión tiene la función de ser una fuerza liberadora a favor de las causas más nobles y justas; puede ser fuerza de liberación y transformación en la sociedad (p.198). De forma similar, el teólogo Hans Küng en su libro Proyecto para una ética mundial, propone lo que para él son las funciones básicas de la religión:
  1. La religión puede proporcionar una especial profundidad, un horizonte global de sentido, incluso ante el dolor, la injusticia, la culpa y el sinsentido, así como un sentido último de la vida frente a la muerte: el de dónde y hacia dónde de nuestro ser.
  2. La religión puede garantizar valores supremos, normas incondicionales, motivaciones profundas y últimos ideales: el por qué y para qué de nuestra responsabilidad.
  3. La religión puede crear, mediante símbolos comunes, rituales, experiencias y objetivos, un hogar para la confianza, la fe, la seguridad, la fortaleza y la esperanza: una comunidad y un hogar espiritual.
  4. La religión puede impulsar la protesta y resistencia contra las situaciones injustas: el, ya actuante, anhelo del «totalmente Otro»[12].

El último ensayo de este libro del Dr. Collazo, Fe, razón y liberación en la teología de Leonardo Boff, se propone una opción preferencial por un camino interdependiente entre razón y fe en clave de liberación. Con su propuesta el autor desea evitar, el fanatismo religioso que privatiza la fe, y por el otro, evitar un racionalismo ortodoxo que desvincula la razón y la fe. Entiendo, que el autor desea expresar que la fe y la razón no son mutuamente excluyentes. Me parece que es un ensayo que requiere la lectura de textos relacionados con la discusión razón – fe que ayude a entender la importancia que tienen estos asuntos para una espiritualidad cristiana liberadora. El autor finaliza este último ensayo con un poema de Mario Benedetti, Por qué cantamos.

A modo de conclusión
El lector tiene en sus manos un libro de reflexiones teológicas enmarcadas en la teología de la liberación. Es un libro escrito con seriedad intelectual y cristiana. Hay que celebrarlo, ya que es una aportación de uno de nuestros intelectuales puertorriqueños que con este y otros escritos han enriquecido el pensamiento teológico puertorriqueño. Enhorabuena, gracias, Dr. Collazo.



[1] Leopoldo Cervantes – Ortíz (ed.). Antología de poesía religiosa latinoamericana. España: Editorial Clíe, 2009.
[2] Para familiarizarse con la teología de la liberación pueden consultar los siguientes libros: Boff, Leonardo y Clodovis Boff. Cómo hacer teología de la liberación. Madrid: Ediciones Paulinas, 1986. Chopp, Rebecca S. The Praxis of Suffering. An Interpretation of Liberation and Political Theologies. Maryknoll: Orbis Books, 1986. Ellacuría, Ignacio y Jon Sobrino. Mysterium Liberationis. Conceptos fundamentales de la teología de la liberación. Vol. I y II. Segunda Edición. Madrid: Editorial Trotta, 1994. Gutiérez, Gustavo. Teología de la liberación. Décimoquinta edición. Salamanca: Ediciones Sígueme, 1994. Tamayo Acosta, Juan J. Para comprender la Teología de la Liberación. Quinta edición. Estella (Navarra): Editorial Verbo Divino, 2000. Tamayo Acosta, Juan J. Presente y futuro de la teología de la liberación. Madrid: San Pablo, 1994. Además, se puede consultar: Samuel Silva Gotay. El pensamiento cristiano revolucionario en América Latina y el Caribe. Tercera edición. Río Piedras: Ediciones Huracán, 1989.
[3] Luis N. Rivera Pagán. Mito, exilio y demonios. Literatura y teología en América Latina. Hato Rey: Publicaciones Puertorriqueñas, 1996. Ver, además, Luis N. Rivera Pagán. Ensayos teológicos desde el Caribe. San Juan: Ediciones Callejón, 2013.
[4] Luis N. Rivera Pagán. A la sombra del Armagedón: reflexiones críticas sobre el desafío nuclear. Río Piedras: UPR y Editorial Edil, 1988.
[5] Anaida Pascual Morán. Fuerza de espíritu, fuerza de paz. Acción civil noviolenta. Hato Rey: Publicaciones Puertorriqueñas, 2003.
[6] Xabier Pikaza. Trinidad. Itinerario de Dios al Hombre. Salamanca: Ediciones Sígueme, 2015. Xabier Pikaza. Teodicea. Itinerarios del hombre a Dios. Salamanca: Ediciones Sígueme, 2013.
[7] En Justo L. González (editor general). Diccionario ilustrado de intérpretes de la fe. España: Editorial Clíe, 2004.
[8] Luis N. Rivera Pagán. Fe Cristiana y descolonización de Puerto Rico. San Juan: Mesa de Diálogo Martin Luther King, Jr., 2013. También pueden consultar: Luis N. Rivera Pagán. Senderos teológicos. El pensamiento evangélico puertorriqueño. Río Piedras: Editorial La Reforma, 1989.
[9] Jürgen Moltmann. La dignidad humana. Salamanca: Ediciones Sígueme, 1983.
[10] José M. Castillo. Espiritualidad para insatisfechos. Madrid: Editorial Trotta, 2007. Suigiero, además, la lectura del llibro de Pedro Casaldáliga y José María Vigil. Espirituallidad de la liberación. Santander: Editorial Sal Terrae, 1992.
[11] Richard T. Hughes. Los mitos de los Estados Unidos de América. Grand Rapids: Libros Desafío, 2005.
[12] Hans Küng. Proyecto de una ética mundial. Madrid: Editorial Trotta, 1991.

lunes, 15 de mayo de 2017

Desarrollo histórico de la soberanía deportiva de Puerto Rico y el futuro de la misma con la incorporación de Puerto Rico como estado federado a los Estados Unidos

Desarrollo histórico de la soberanía deportiva de Puerto Rico y el futuro de la misma con la incorporación de Puerto Rico como estado federado a los Estados Unidos.
Por Edwin R. Jusino

El debate del estatus de Puerto Rico existe desde tiempos de España. Sin embargo, el tema sobre la identidad olímpica o deportiva de Puerto Rico en el ámbito nacional es un fenómeno del siglo XX y se ha convertido en uno de los temas de debates principales en cuanto al tema del estatus de Puerto Rico. Los sectores anexionistas o estadistas de Puerto Rico mantienen erróneamente que el Comité Olímpico al ser una franquicia privada puede mantenerse a pesar de integrarse Puerto Rico de lleno a la Unión. La documentación y reglamentación vigente no apoyan esta teoría, sin embargo, si hay apoyo a la continua participación de Puerto Rico en diversos deportes, tanto individuales como de conjunto.

Breve mirada histórica y analítica del Olimpismo en Puerto Rico
Para comenzar el estudio sobre cualquier eventualidad del olimpismo en Puerto Rico, de la misma escoger la anexión como rumbo a seguir de futuro, hay que mirar al pasado. Pero no solo el linaje directo de la lucha por tener un Comité Olímpico propio, sino el contexto histórico general en el que se forma el movimiento. El olimpismo llegó a Puerto Rico en el año 1948 tras los esfuerzos diplomáticos de Julio Enrique Monagas[1], según escribe en su libro Los deportes en Puerto Rico, Emilio Huyke.
Puerto Rico participó por primera vez en unos Juegos Olímpicos en la Undécima Olimpiada Moderna celebrada en Londres en el año 1948. Esta fue una gestión realizada por el señor Julio Enrique Monagas, entonces administrador de Parques y Recreo Público y presidente de la Federación de Atletismo, quien encabezó una delegación de los deportes de Atletismo, Boxeo y Tiro que “se presentó” en Londres a reclamar derecho de participación. Fue una dura lucha que tuvo que librar el señor Monagas en el campo de la diplomacia. Surgió una fuerte oposición a la participación de Puerto Rico, pero también muchos países veían con simpatía la gestión que se realizaba. Finalmente, Puerto Rico fue aceptado como miembro de la familia olímpica. Lo que más influyó en la decisión fue el hecho de que Puerto Rico era ya un participante veterano en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que es una actividad reconocida por el Comité Olímpico Internacional en su clasificación de “Juegos Regionales” y la determinación del pequeño grupo de puertorriqueños que había hecho un viaje tan largo para decir “¡Presente!” en la justa olímpica.[2]
El doctor en historia, Antonio Sotomayor, presenta en su obra, The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico[3], una perspectiva sobre las condiciones sociopolíticas de esas décadas. 
With the effects of the Great Depression in the island, Puerto Ricans faced even more pronounced and dire conditions. As a result, social and political instability swept the island, producing numerous strikes that brought clashes, often fatal, between the police and the Partido Nacionalista. In response autonomists and other liberals formed new alliances and new parties, including the Partido Popular Democrático in 1938, to tackle different ways of solving the country's crisis. Although the punitive Tyding's Bill was introduced in the U.S. House of Representatives in 1936 and would have granted independence to Puerto Ricans, it failed. Puerto Ricans then sought ameliorative reforms to maintain an association with the United States... To some extent sport during the 1930's was a cultural and recreational way to mitigate the political and social instability of the decade. Like the country's economic and social conditions, sports and athletics developed to a limited extent until the 1940's and 1950's, when they flourished.[4]
La importancia de conocer el contexto sociopolítico en un marco general en relación a lo deportivo es imperativa. La expresión cultural regionalista[5] o nacionalista, es expresada a través de los deportes.
Although this fact is often overlooked, sports and politics are intricately intertwined. Politics often manifests itself through sports, and sports have often been used as political propaganda. This is possible because of the ways both national and local identities become associated with sports teams. This is particularly true in the realm of what has become the world’s sport: soccer. Since so many countries have become so physically, emotionally and mentally invested in that particular game, it has become another branch of political expression, identity and propaganda. For example, the 1978 World Cup in Argentina was used by the country’s dictators to try and show the rest of the world that there was harmony under the dictatorship. In Europe, during the era of the dictatorships that plagued the continent from 1930s through 1950s, the link between soccer and politics was extremely visible.[6]
En este punto coincide el periodista Hermes Ayala, quien, en un artículo para el periódico digital, Noticel, escribió que “estadolibristas y estadistas por igual, coinciden en que el deporte ha ayudado a forjar de una identidad nacional”.[7] Es por esto que el contexto de la lucha de Julio Enrique Monagas de que se aceptara la delegación de Puerto Rico, y la resistencia de algunos otros países es importante[8]. En el 1948 todavía no se había forjado el concepto del “Estado Libre Asociado”, o mejor dicho, todavía no se había aprobado la Ley 600 y la Constitución del 1952 de Puerto Rico. Puerto Rico fue el primer territorio bajo la soberanía estadounidense en participar como un ente aparte.

Más allá del contexto local, el periodo entre 1945-1970 es conocido como la “Posguerra”, donde se comienza a gesticular una nueva hegemonía internacional, y como consecuencia, la división del mundo entre occidente y oriente.[9]
…luego de la Segunda Guerra Mundial, fueron los Estados Unidos quienes surgieron como la nación más poderosa del planeta creando junto a Gran Bretaña y Francia, sus aliados en tiempo de guerra, este polo magnético al cual fueron atraídos la mayoría de los países Occidentales que compartían la identidad nacional estadounidense. Esta identidad, explica Samuel Huntington, “se ha definido culturalmente por la herencia de la civilización occidental y políticamente por los principios del credo norteamericano en el que coinciden los estadounidenses: libertad, democracia, individualismo, igualdad ante la ley, constitucionalismo y propiedad privada”. Luego de la Segunda Guerra Mundial esta identidad norteamericana, “inseparable de su compromiso con los valores liberales y democráticos”, era comúnmente equiparada con la identidad de la mayoría de las democracias occidentales.[10]
Según Sotomayor, Puerto Rico pasa en la década de los 1940's por un proceso formativo de su identidad nacional y cultural. De hecho, Sotomayor compara dicho desarrollo con el experimentado por el caribe francés (Martinica y Guadalupe) durante la misma década.[11] Siguiendo el mismo pensamiento, Sotomayor dice que “in the 1930's Puerto Ricans embodied the dualisms of U.S. and Puerto Rican sport identities in the regional Central American and Caribbean Games.”[12] De hecho, Sotomayor postula que los deportes fueron usados como herramienta de sus programas populistas por el emergente movimiento autonomista, en la década de los 1940's, liderado por el Partido Popular Democrático y Julio Enrique Monagas.[13]
The plan to build an athletic infraestructure was achieved as a result of World War II. Puerto Rico experience an economic boost due to its strategic position in Caribbean waters. The United States invested heavily in strengthening its military bases and built their largest base outside Continental United States in Ceiba and Vieques, both part of Puerto Rico. Spinning off New Deal policies of the 1930's while fully anchored in a war, the United States spent $1.2 billion between 1939 and 1950 on programs that included provisions for a healthy citizenry and potential soldiers; however, this was also an investment in developing Puerto Rico as an island symbol of the U.S. democracy and progressive values. Taking into account the ways international and Olympic sport is the scenario for athletic deplomacy and geopolitics, it is easy to understand the U.S. investment in sport in this strategically situated colony.[14]
La entrada de Puerto Rico al mundo de los deportes internacionales no estuvo sin críticas; particularmente por la figura de Monagas quien había permanecido cercano a la administración popular de Luis Muñoz Marín.[15] Las críticas, sin embargo, eran mayormente relacionadas al modelo americano que había impulsado Monagas.
This was the model familiar to Monagas when he reorganized Puerto Rico's Olympic Committee, one where Puerto Ricans aspired to yet were not able (and some did not want) to implement. The lack of independent financially capable nonprofit organizations to fund the COPR made this option nonexistent. Furthermore, the history of centralized authoritative political control shaped COPR's symbiotic attachment to the central government.[16].
Pero esto no excluyó que el debate del estatus de Puerto Rico fuera parte de la conversación y las controversias sobre si Puerto Rico debiera o no participar de las Olimpiadas del 1948.
Locally the problems were not only economic, but also political. Athletes knew the politics behind Puerto Rico's participating at the Olympics in London. José “Fofó” Vicente[17], a track and field athlete, stated in a 2007 interview that the controversy was due to “political and economic” reasons. Yet, as he put it, he was an athlete and would not get involved. Other athletes were not as neutral. Regarding the controversy of Puerto Rico's participating as a separate country, José Celso Barbosa[18], a pol vaulter, stated in an interview in 2007, “The American Olympic Committee could have vetoed it by stating: 'they are American citizens. If they are going to compete, they must compete with us.” Although affirming he was into politics at the time, he was aware of the political dilemma. More so than today, Puerto Ricans were aware of the colonial situation. Being able to participate in the Olympic Games separate from the United States was, for some, a great feat.[19]
El asunto del estatus de Puerto Rico también se visualizó ya estando la delegación en Londres. La bandera que se usó en la Olimpiada del 1948 fue una bandera blanca con el escudo de Puerto Rico sobre el fondo blanco. Ya en Londres se suscitó una controversia por la bandera[20], pues Miguel A. Barasorda quería marchar en el estadio con la monoestrellada, mientras que, por órdenes de Muñoz, Monagas no quiso aprobarlo. Esto debido a que la monoestrellada en la década de los 1940's era considerada como un símbolo nacionalista. Sotomayor adicionalmente sugiere que la influencia del macartismo es parte de la razón por la cual se reprime el uso de símbolos independentistas.
Puerto Rico, even though performing as a nation among nations, was not to be confused with an independent nation-state. Displaying the prohibited Puerto Rican flag at the Olympic Games would connect Puerto Rico's participation with the nationalists and pro-independence movement, which was criminalized in 1948. Influence by McCarthyism, which persecuted Americans for alleged sympathy with leftist or communist ideas, the Puerto Rican legislature approved Law No. 53, known as “Ley de la Mordaza” or Gag Law. This Gag Law prohibited any display of pro-Independence nationalist symbols, including the Puerto Rican flag, as well as prohibiting meetings, songs, and art with nationalist connotations, claiming they were communist plots to overthrow the government.[21]
Sotomayor presenta en su escrito razones por las cuales el Comité Olímpico Internacional tuvo un debate sobre la aceptación de Puerto Rico como miembro. Particularmente, debido a que la solicitud de Puerto Rico para ingresar como miembro no fue hecha por una organización no gubernamental, sino por un departamento del gobierno insular de Puerto Rico.
It is not the practice of the Federation[22] to affiliate government departments, but rather national associations of independent formation; it would therefore appear that the correct body to affiliate on behalf of Puerto Rico is the insular Track and Field association of Puerto Rico, and the same regulation is applicable to your National Olympic Commitee”. Holt[23] included a copy of the rules and regulations of the IAAF and an application form for admission to the IAAF with a declaration as to amateur status[24].”
Demás está decir que la recepción de la participación de Puerto Rico en Londres 1948 fue positiva. Tanto Piñero, como los medios de comunicación y líderes deportivos locales felicitaron a la delegación puertorriqueña.[25] Sotomayor plantea que la participación de Puerto Rico en los Juegos Olímpicos tuvo la reacción contraria a lo que se esperaba tanto por grupos descolonizadores, como también por lo que pensaban las autoridades que promovería el sentimiento independentista.
The result of this international participation actually worked against political groups looking for decolonization. As the PPD and Muñoz Marín's government accepted and supported Puerto Rico's participation in the Olympic Games and other international sporting tournaments, and as this participation was allowed by U.S. Political and sport groups, Puerto Rico's colonial status began to be cemented. Having a venue to perform the nation in international sporting events while still a colonial territory allowed Puerto Ricans to foster a national identity without the need to have political sovereignty.[26]
La Ley 95-606 del 1978, la reglamentación internacional actual y el debate moderno
Con el advenimiento de otro plebiscito de estatus, tras la derrota de la opción territorial en el 2012, y la implantación de la Ley PROMESA por parte del Congreso el año pasado, vuelve a la palestra pública el debate sobre si Puerto Rico bajo la estadidad pudiera continuar con el proyecto olímpico, cuyo principio se discutió en la sección anterior. La respuesta se puede encontrar en el texto de la Ley 95-606 del 1978 mejor conocida como “Amateur Sports Act” y la revisión de dicha ley, Ley 105-225 de agosto 12, de 1998. El artículo 220505, sección C, incisos 1-2 estipula lo siguiente (en el caso de la ley del 1978 sería la Sección 105, incisos del 1-2):
Serve as the coordinating body for amateur athletic activity in the United States directly related to international amateur athletic competition; represent the United States as its national Olympic committee in relations with the International Olympic Committee and the Pan-American Sports Organization[27].”
Sotomayor atiende este mismo asunto en su obra llegando a la conclusión que bajo la anexión a los Estados Unidos, Puerto Rico no mantendría su representación olímpica:
Among the different elements in the discussion over Puerto Rico's status are the Olympic Committee and beauty pageants[28]. Although some “estadistas” affirm the possibility of keeping the Puerto Rican National Olympic Committee under U.S. Statehood, the U.S. Congress passed the Ted Stevens Olympic and Amateur Sports Act (36 USC Sec. 220501[29]) in 1998, which states that there can only be only one NOC[30] that represents the United States. Genaro Marchand and Richard Carrion, both IOC members, have said that Puerto Rico would not keep its NOC under U.S. Statehood. Taking all arguments together, and due to U.S. Federal law that recognizes only one USOC[31], it seems highly unlikely that the United States would allow Puerto Ricans to keep their NOC in the case of statehood. The power and popularity of COPR for Puerto Ricans is noted by the “estadistas”, and rejecting the COPR under U.S. Statehood does not seem to be a favorable political position.[32]
También vale mencionar el ejemplo del Comité Olímpico de las Antillas Holandesas, que en 2010 cesaron de existir como un territorio y se incorporaron como parte integral del Reino de los Países Bajos.[33] El Comité Olímpico de las Antillas Holandesas dejó de ser reconocido por el Comité Olímpico Internacional en 2011 a pesar del cabildeo de parte de las islas antillanas.
Hasta el pasado sábado 9 de julio, las Antillas Holandesas contaban con su propio Comité Olímpico Nacional (CON) en calidad de territorio de los Países Bajos (Holanda), muy similar a la situación de Puerto Rico como territorio de los Estados Unidos. Sin embargo, en la 123ra Asamblea General del Comité Olímpico Internacional (COI) que se celebró la semana pasada en Durban, Sudáfrica, se decidió retirarles la franquicia olímpica a las Antillas Holandesas debido a que, desde el 10 de octubre de 2010, cambió su composición política y pasaron a ser parte integral de los Países Bajos. De este modo, la Asamblea General ratificó lo que el Comité Ejecutivo del COI había propuesto desde la disolución de las Antillas Holandesas como país, y amparada en lo contenido en la Carta Olímpica. El reglamento del COI establece que, para tener un Comité Olímpico Nacional, el requisito principal es ser un país independiente, reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Se decide retirar el reconocimiento del COI al Comité Olímpico Nacional de las Antillas Holandesas y aprueba una serie de medidas incluidas, esencialmente dirigidas a preservar en lo posible los intereses de los atletas, en particular en relación a los Juegos Olímpicos Londres 2012, señala el acuerdo.[34]
En la opinión del ex presidente de la Federación de Beisbol de Puerto Rico por 30 años y ex vicepresidente del Comité Olímpico por 17 años, Osvaldo Gil, Puerto Rico no pudiera retener su comité de anexarse a Estados Unidos.
No creo que Puerto Rico pueda convertirse en estado y conservar su Comité Olímpico. Tendría que ser una prima donna en el mundo, porque nadie tiene eso. Lo contrario sería pensar que van a hacer una regla especial para nosotros, y la experiencia es que esa regla nunca la han hecho para nadie.[35]
No obstante, el ex Secretario de Recreación y Deportes, miembro del Partido Nuevo Progresista, entidad que aboga por la estadidad en Puerto Rico, Henry Neumann, menciona a Hong Kong como un ejemplo viable que en el pasado el Comité Olímpico a avalado.
De otro lado, el secretario del Departamento de Recreación y Deportes, Henry Neumann, se mostró sorprendido con la noticia del retiro del aval olímpico a Antillas Holandesas, pues cree que la decisión del COI “va directamente en contra de decisiones del pasado”, en referencia al caso de Hong Kong, país que pasó a ser parte de China en 1997 y mantuvo su representación olímpica, aunque reconoce que habría que estudiar las diferencias de las relaciones políticas de Hong Kong respecto a China y los casos de las Antillas Holandesas y Puerto Rico. “El COI y la representación internacional es una franquicia que, una vez se otorgaba, no se quitaba. En eso nos amparábamos para defender la representación de Puerto Rico en caso de ser el estado 51”, añadió Neumann.” A diferencia de Osvaldo Gil, el presidente del DRD entiende que, de ser el estado 51 de EE.UU., “se puede dar la batalla para que Puerto Rico mantenga su representación deportiva internacional... como un caso especial”. Neumann también entiende que la tradición deportiva boricua es mucho más amplia y fuerte que la de Antillas Holandesas, y eso tendría un gran peso al momento de defender la franquicia olímpica, “por la tradición, el respeto y el performance. Ese historial no lo tiene Antillas Holandesas”.[36]
Se debe enfatizar que hay una sola diferencia entre la disolución de la Antillas Holandesas[37] como un ente político y la incorporación de Puerto Rico como estado. En el caso de las Antillas Holandesas, los componentes que las formaban pasaron a ser o países miembros del Reino de las Antillas Holandesas o municipios de dicho reino[38]. Por tanto, el área geográfica que comprendía el antiguo territorio cesó de existir al romperse en varias entidades jurídicas “independientes”.[39]

Por tanto, basándose en lo estipulado en el excepto de la ley antes citada, por lo investigado por parte de Sotomayor, y las opiniones vertidas por líderes deportivos en un rotativo estatal, de Puerto Rico solicitar el ingreso como estado de la Unión estadounidense no pudiera retener la representación olímpica y panamericana, ya que esas competiciones están directamente separadas para el USOC. Además, en cuanto a lo propuesto por Neumann, la reglamentación vigente usa como parámetros a las Naciones Unidas, algo que en el caso de Hong Kong y de Puerto Rico, no estaba vigente explícitamente al momento de ingresar como miembros. No obstante, la representación puertorriqueña en los Juegos Centroamericanos y del Caribe y otras competiciones internacionales en diferentes disciplinas deportivas si pudieran retenerse, ya que la ley federal no dispone un monopolio del USOC en esas áreas.[40]

En el 2014 la Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe (ODECABE) cambió sus estatutos para permitir territorios que no tienen Comité Olímpico como miembros asociados y permitirle participar de los Juegos Centroamericanos y del Caribe (JJCC) en Barranquilla Colombia en el 2018.[41] Territorios incorporados como Martinica, Guadalupe y Monserrate, que son Departamentos de Ultramar[42] del estado francés, San Martín y Aruba, que son países miembros del Reino de los Paises Bajos[43], podrán participar de los JJCC.
We sought permission from the IOC to modify the CACSO statutes to allow this kind of membership so that these territories could participate in the CAC games,” Steve Stoute, vice president of the Caribbean Association of National Olympic Committees, said to Around the Rings. Most of [the NOCs] are already associate members of CANOC, but they weren’t members of CACSO. Stoute said that he hopes that the IOC will look into the situation while implementing any changes from Olympic Agenda 2020. I’m hoping that the 2020 reorganization also changes this line in the sand situation,” Stoute said. A number of these countries that are not allowed membership to the IOC although they have a similar status to a number of countries that are [current] members.[44]
Por lo mencionado por Steve Stoute se puede afirmar que hay por lo menos indicios de cambio de perspectiva dentro del movimiento olímpico. Por lo menos dentro de la ODECABE hay espacio para territorios incorporados a sus metrópolis principales. Pero, al momento de la publicación de este ensayo, la reglamentación olímpica impediría el reconocimiento de un Puerto Rico anexado a los Estados Unidos.

Como parte de esta investigación, se escogieron varios ejemplos de reglamentos deportivos internacionales para dilucidar las particularidades de retención de membresía específicas. Para hacer un estudio completo en cuanto a todos los deportes sería demasiado exhaustivo, y tema de tesis, algo que no pretende ser este escrito. El primer deporte que se presenta es el Tenis, particularmente luego de la hazaña histórica de las olimpiadas del 2016 donde la puertorriqueña Mónica Puig conquistó la primera medalla de oro para Puerto Rico.[45] El cuerpo rector del tenis internacional, la Federación Internacional de Tenis (International Tenis Federation en inglés con sus siglas ITF), estipula lo siguiente en sus estatutos:
There shall be only one member per country or territory unless otherwise decided by a two thirds majority Resolution of the Council.[46]
Ya siendo miembros en derecho de la ITF, en teoría el Consejo del ITF pudiera votar para permitir la existencia de la Puerto Rico Tennis Association (PRTA). Según los estatutos de la ITF solo hay 1 razón para la expulsión de un miembro:
Any Class B or Class C Member which, in the opinion of the Council, does not adequately represent the game of tennis in its country or territory or which has not acted in accordance with the Constitution (or any Rules or Bye-laws published from time to time by the Company), shall stand expelled from the Company and its shares forfeited if a Resolutions of the Council to that effect is carried by a four-fifths majority.[47]
Por tanto, a menos que la ITF entienda que la PRTA no representa adecuadamente el deporte del tenis en su territorio, o haya violado los estatutos de la ITF, la PRTA retendría su franquicia como federación; siempre y en tanto la PRTA no renuncie a la misma.[48] Así que, Puerto Rico sea o no estado, Mónica Puig podrá continuar representando a la monoestrellada a nivel internacional en los eventos de la ITF.

Por otro lado, en el caso de la Confederación Mundial de Beisbol y Softbol (WBSC por sus siglas en inglés) tienen que no contempla la incorporación de un territorio a otro, ambos con federaciones particulares.

A Member’s affiliation to WBSC shall automatically end if the Member no longer exists as a legal entity or if the Member withdraws its affiliation by giving written notice thereof to the WBSC, but terminating the status as a National Federation shall not terminate the Member’s obligations to the WBSC.[49]

Por tanto, a menos que las federaciones de beisbol y de softbol dejen de existir, las mismas podrían continuar participando en competencias internacionales de la WBSC. Lo único que estipula el reglamento de la WBSC es al momento de convertirse en miembro. Un territorio sin Comité Olímpico puede ser tomado en consideración como miembro interino.
An applicant to be a Member from a geographic territory that does not have a recognized National Olympic Committee may be admitted as an Interim Member if it meets all the other criteria of Article 7.3. The General Meeting, in future, may approve other classes of Member by Special Resolution.[50]
La reglamentación del beisbol permite que bajo ciertas condiciones el equipo nacional de Puerto Rico pueda continuar participando del Clásico Mundial de Beisbol y otras competiciones como lo es la Serie del Caribe, etc.

No obstante, el caso del baloncesto es un poco más complicado. Los nuevos estatutos de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) del pasado Congreso de agosto 2014 estipula varias razones por las cuales un miembro puede ser suspendido. Pero, para la expulsión de un miembro, la FIBA no tiene que proveer razón.
Based on a proposal put forward by the Central Board, the Congress may decide to expel a national member federation without indication of grounds.[51]
Llama también la atención el Artículo 10.2 que dice lo siguiente:
On the initiative of the Secretary General, the Central Board may suspend a national member federation for other important reasons and, in particular, when: a. the General Statutes, Internal Regulations, other rules and regulations, or decisions of FIBA are violated; b. the requirement of Article 7 are no longer fulfilled; and/or c. one or more of the obligations of Article 9 and 12 is not being met.[52]
El Artículo 7.1 habla de los requisitos para ser miembro que son países independientes reconocidos por la comunidad internacional. Sin embargo, el Artículo 7.1 termina diciendo “esta provisión no afectará el estatus de los miembros actuales”.[53] El artículo 7.2 dice que “sujeto al Artículo 7.3, solo habrá una federación nacional por país será admitida a la membresía de FIBA[54]”. Por tanto, la probabilidad de retener la Federación de Baloncesto de Puerto Rico, con el lenguaje como está en los estatutos, es bien baja.

Finalmente, el último ejemplo para discutir es el de la Federación Internacional de Fútbol de Asociación (FIFA). Debido a que ya la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) es miembro de la FIFA, tenemos que ir al Artículo 10 del reglamento de la FIFA.
El Congreso decidirá sobre la admisión, la suspensión o la expulsión de las federaciones miembro siempre que así lo recomiende el Consejo.[55]
Por tanto, estaría en manos del Congreso de la FIFA la expulsión de Puerto Rico, si es que así lo recomendase la el Consejo, antes Comité Ejecutivo, del organismo rector internacional. FIFA reconoce como federaciones miembros a territorios sin Comité Olímpico como lo son los ya mencionados Aruba, San Martín, Curazao, y otros como Gibraltar, Bermuda, Turcos y Caicos que están bajo soberanía británica. Además, Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte, y Gales participan como naciones independientes separadas, a pesar de que son las 4 entidades principales del Reino Unido y no son políticamente reconocidas en las Naciones Unidas, y no tienen Comité Olímpico propio, sino en colectivo.[56]

En la Confederación de Norte y Centroamérica y el Caribe (CONCACAF por sus siglas en inglés) se da el fenómeno de que los Departamentos de Ultramar franceses como Guadalupe, Martinica y Guyana Francesa, participan de los torneos regionales, a pesar de que no son miembros en propiedad de la FIFA. Por tanto, el argumento de que un Puerto Rico anexado como estado de la Unión estadounidense y que pudiera seguir participando en el fútbol como una federación aparte se puede hacer y con varios ejemplos ya mencionados y no.

En conclusión, con las leyes federales y la reglamentación Olímpica el Comité Olímpico de Puerto Rico no pudiera continuar en existencia. No obstante, como ya visto en la reglamentación deportiva presentada, el Comité Olímpico solo no es suficiente para afirmar que la representación deportiva de Puerto Rico cesaría de existir. Dependerá de los organismos deportivos particulares. A través de los diferentes ejemplos se pudo demostrar que la independencia o la anexión no son factores determinantes para retener una identidad cultural deportiva.

Lo que, si se debe resaltar y criticar es el uso del olimpismo, desde sus inicios con Monagas hasta la actualidad, para mantener el “status quo” y el inmovilismo.

Bibliografía

Documentos Primarios

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Periódicos

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Enciclopedias

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[1] Las movidas internacionales por Julio Monagas, descritas por Antonio Sotomayor en su obra citada más adelante, explica cómo Monagas logró decir ¡Presente! en Londes 1948. Ver páginas 112-120 de Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU. Como ejemplo de lo mencionado está la Unión Gubernamental Deportiva Interamericana. Huyke no profundiza en los esfuerzos diplomáticos de Monagas, y solo relata una parte de la historia, sin mencionar que las conexiones internacionales desarrolladas por Monagas aportaron a la inclusión de Puerto Rico, aunque no fueran el único factor.
[2] Huyke, E.  Los deportes en Puerto Rico. Troutman Press. Sharon, Connecticut, Estados Unidos, 1968. pp 278-279.
[3] Es la obra más reciente en ser escrita sobre el tema. La otra gran obra fue escrita por Emilio Huyke (Ya antes citada) en los 1960's.
[4] Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU., 2016. pp 63.
[5] En los deportes como el baloncesto, fútbol americano, o fútbol de asociación las ciudades o hasta regiones desarrollan o hasta prestan su identidad a un equipo en particular. Este es el ejemplo de los “Packers” de Gren Bay, cuyos ciudadanos de la ciudad son parte dueños del equipo, los “Thunder” del Oklahoma City, o el Real Madrid o el Barcelona, en el contexto del fútbol de asociación.
[6] Anspach, E., Almog, H. y Taylor Football and Politics in Europe, 1930s-1950s en Soccer Politics: A Discussion Forum About the Power of the Global Game, Duke University, Durham, Carolina del Norte, Estados Unidos, 2009. Extraido en linea 2/12/2017 en https://sites.duke.edu/wcwp/research-projects/football-and-politics-in-europe-1930s-1950s/
[7] Ayala, H. De Londres a Londres: Olímpica historia de identidad nacional Noticel, San Juan, Puerto Rico 16 de marzo de 2012. Extraído en linea 2/12/2017 en http://www.noticel.com/noticia/120428/de-londres-a-londres-olimpica-historia-de-identidad-nacional.html
[8] Huyke no especifica en su escrito los países que estuvieron en contra de la entrada de Puerto Rico al olimpismo internacional. No obstante, Sotomayor si nos presenta información sobre la oposición de Estados Unidos a la entrada de Puerto Rico al Comité Olímpico Internacional. Ver páginas 115-118 de The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU.
[9] Para mejor explicar, el comienzo de la Guerra Fría entre los Estados Unidos y sus aliados con el bloque comunista dirigido por la Unión Soviética.
[10] Pace, N. El desarrollo de la identidad norteamericana: de la Guerra Fría a la Guerra de Irak Centro Argentino de Estudios Internacionales, Programa Teoría de las Relaciones Internacionales, 2002. Extraído en línea 2/12/2017 en http://www.caei.com.ar/sites/default/files/19_5.pdf
[11] Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU., 2016. pp 103.
[12] Ibidem pp. 103.
[13] Ibidem pp. 104.
[14] Ibidem pp. 105.
[15] Ibidem pp. 110-111. Luis Muñoz Marín era el gobernador de Puerto Rico en el 1948 y responsable de la Ley de la Mordaza, ver página 6 de este escrito.
[16] Ibidem pp. 109-110.
[17] José “Fofó” Vicente fue miembro de la delegación de Pista y Campo de Puerto Rico enviada a Londres 1948.
[18] José Celso Barbosa, el nieto del difunto líder estadista y fundador del Partido Republicano de Puerto Rico, fue miembro de la delegación del 1948 a Londres.
[19] Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU., 2016. pp. 118-120.
[20] Ibidem pp. 121-122.
[21] Ibidem pp. 122-123.
[22] En este contexto, Federación se refiere a la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF por sus siglas en inglés).
[23] Ernest J. Holt, Secretario General de la IAAF y Director de Organización de los Juegos Londres 1948.
[24]Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU., 2016. pp 116.
[25] Ibidem pp 125-126.
[26] Ibidem pp. 127.
[27] United States Government Publishing Office Public Law 95-606 or Amateur Sports Act of 1978, 95th Congress, Washington D.C., Estados Unidos, Noviembre 8, 1978 pp 3. Extraido en linea 2/14/2017 en: https://www.gpo.gov/fdsys/pkg/STATUTE-92/pdf/STATUTE-92-Pg3045.pdf
[28] Al día de hoy no entiendo cómo es posible que un certamen de belleza sea parte de la identidad de un pueblo. Pero bueno, estipulado eso, seguimos.
[29] Sotomayor se equivoca un tanto en esta parte, ya que el Amateur Sports Act del 1978 también tenía la disposición. Una revisión de ambos documentos denota el mismo texto en ambas versiones. Ver cita 27.
[30] Siglas de Comité Olímpico Nacional en inglés, National Olympic Comittee.
[31] Comité Olímpico de los Estados Unidos
[32] Sotomayor, A. The Sovereign Colony: Olympic Sport, National Identity and International Politics in Puerto Rico, University of Nebraska Press, Lincoln and London, Nebraska, EE.UU., 2016. pp 210-211.
[33] Beatrix, S.M.R.H.  Decree of September 23, 2010 fixing the date of application of Articles I and II of the Act amending Regulations in connection with the dissolution of the Netherlands Antilles, Staatsblad, Vol. 2010, Reino de los Países Bajos, Octubre 1, 2010. Extraido en linea 2/15/2017 en:  https://zoek.officielebekendmakingen.nl/stb-2010-387.html
[34] Redacción Primera Hora. Sin Comité Olímpico Antillas Holandesas, Periódico Primera Hora, versión digital. Julio 12, 2011. Extraído en línea 2/15/2017 en: http://www.primerahora.com/deportes/otros/nota/sincomiteolimpicoantillasholandesas-525137/
[35] Ibidem
[36] Ibidem
[37] Bonaire, San Eustacio, Saba, Curazao, y San Martín.
[38] Editores de la Enciclopedia Británica. Curaçao, Enciclopedia Británica en línea, enero 4, 2017 en https://global.britannica.com/place/Curacao
[39] Independiente en el sentido de que dejaron de ser la entidad jurídica de las Antillas Holandesas y las unidades individuales pasaron a ser nuevas unidades jurídicas distintas.
[40] Al momento, debido a que ningún estado previo ha entrado con un Comité Olímpico. Por tanto, la posibilidad existe que algunas federaciones demanden o cabildeen en el Congreso para evitar que las federaciones boricuas no puedan seguir operando. No obstante, es una especulación, sin ningún precedente previo a nivel federativo, por lo que solo se puede trabajar con la reglamentación vigente y existente. No obstante, también se puede argumentar que la ley es inconstitucional ya que la Constitución federal no enumera los deportes como un área en el que tiene jurisdicción, por lo que es un poder que está delegado a los estados bajo la 9na y 10ma enmiendas de la Constitución.
[41] Bauer, A. CACSO to Admit Associate Members aroundtherings.com, diciembre 2, 2014 en: http://aroundtherings.com/site/A__49324/Title__CACSO-to-Admit-Associate-Members/292/Articles
[42] Un Departamento de Ultramar es el equivalente a una provincia o un estado federado de los Estados Unidos.
[43] En el arreglo constitucional holandés, los países miembros son algo similar a un estado federado de los Estados Unidos en el sentido de que tienen igual soberanía y representación en el parlamento holandés. Ambos eran parte de lo que era el Comité Olímpico de las Antillas Holandesas.
[44] Bauer, A. CACSO to Admit Associate Members aroundtherings.com, diciembre 2, 2014 en: http://aroundtherings.com/site/A__49324/Title__CACSO-to-Admit-Associate-Members/292/Articles
[45] Fuentes, C. Mónica Puig gana histórico oro en Río 2016 Periódico Metro Puerto Rico, edición en línea, agosto 14 de 2016. Extraído en línea 2/14/2017 en: https://www.metro.pr/pr/deportes/2016/08/14/monica-puig-gana-historico-oro-rio-2016.html
[46] El Consejo es el organismo rector que compone los miembros hábiles con derecho a voto. ITF. Memorandum, Articles of Association and Bye-Laws of ITF Limited: Trading as the International Tennis Federation Asociación Mundial del Tennis, Nassau, Bahamas. 2016. pp 9.
[47] Ibidem pp. 9.
[48] Ibidem pp. 9.
[49] World Baseball Softball Confederation. Articles of Association, WBSC General Congress, 10 de mayo de 2014. pp. 9.
[50] Ibidem pp. 6.
[51] FIBA. FIBA General Statutes, Congreso de la FIBA, 28-29 de agosto de 2014. pp 6.
[52] Ibidem pp. 6.
[53] Ibidem pp. 3.
[54] Ibidem pp. 3.
[55] FIFA. Reglamento de Gobernanza de la FIFA, Federación Internacional de Fútbol de Asociación, Zuric, Suiza, mayo 2016. pp. 12.
[56] Visitar el portal oficial de FIFA y buscar cada una de las federaciones ya mencionadas www.fifa.com.